10 tips para lograr la magia sin tener varita.
¿Quieres comer lo que te de la gana sin subir de peso? Quizás lo que necesitas es una varita mágica.
Yo la busqué durante años y puedo decirte con la autoridad de la experiencia: la varita que funcione en este mundo de muggles no existe.
Mis amigas y yo fantaseábamos con encontrarla y prometimos cada una que si lo hacía, la compartiría con todas. Pero no existe :(
Puedes negarte a aceptarlo, enarbolar la bandera de optimista y creer que sí la vas a encontrar, engañarte en buscar la ruta más corta o la mágica química o médica, pero no la encontrarás.
“La magia eres tú” decía un letrerito en el vestidor de una de las nutricionistas que visité. Me ofendí cuando lo leí, porque yo estaba convencida de que no tenía ni disciplina ni fuerza de voluntad para apegarme a una dieta (y a esa, tampoco) así que de ninguna manera la magia podría ser yo. Fracasada yo. Sigo pensando que la magia no puedo ser yo, pero cambiaría el letrerito por “La magia es el método, la obediencia y la creatividad”.
Hoy justamente cumplo un año de haber empezado mi tratamiento en Plusvida y veo que logré la magia, sin tener varita y eso es mucho más que asombroso. Es cierto, nunca encontré la varita pero eso no quiere decir que no pueda compartirle a mis amigas qué se necesita para que cualquiera pueda lograr la magia de estar en su peso saludable, si está dispuesta a trabajar para conseguirlo. Por eso te comparto estos 10 tips que me llevaron al éxito:
Saber que algo está mal y decidir hacer algo al respecto, sin buscar curas milagrosas.
Encontrar el método que funcione para tí: yo probé al menos dos nutricionistas y una endocrinóloga, para finalmente caer en cuenta de que las dietas sirven. Cualquiera sirve. La que no servía para hacer la dieta era yo. Si tú eres disciplinada y puedes apegarte a una dieta, ¡maravilloso! Pero si ves que la que falla eres tú, podrías acercarte a Plusvida tú también. (www.plusvida.org) Para mí, la base de la magia fue este método.
Estar dispuesta a hacer lo que sea necesario (dentro de tus valores) para lograr tu meta. No es lo mismo querer encontrar la varita mágica que estar dispuesto a hacer lo que sea necesario para alcanzar tu sueño. Eso implica la inversión de recursos económicos, de tiempo, de energía, de cabeza y de voluntad.
Entender de qué se trata el tratamiento que elijas: sus lineamientos, escuchar tus indicaciones, preguntar si no entiendes algo y sobre todo, comprar con tu corazón la idea de que fallar no es opción para ti.
Entender que es necesario ser obediente, confiar, tener una actitud abierta, olvidar todo los conocimientos de nutrición que tienes pero no te han servido hasta ahora y abrazar el nuevo tratamiento, sin pensar en lo anterior.
Comprender que cuando se está bajando de peso, hay que cuidarse todos y cada uno de los días, sin importar si es feriado, día festivo, vacaciones, celebración o pena. Es cierto, algunas personas se cuidan entre semana y se dan permisos el fin de semana, pero te cuento el secreto: eso sirve para quienes ya están en su peso saludable, no para quienes quieren alcanzarlo.
Aprender a poner a la comida en el centro del plato pero no en el centro de tus horas del día.
Ser disciplinada con todo lo que pida tu tratamiento
Tener paciencia: concentrarte en hacer al 100 lo que te toca y aceptar que el cuerpo tiene sus ritmos y bajará cuando esté listo, no cuando tú lo decidas
Lograr encontrar motivación cada día para seguir esforzándome. Nadie dijo que fuera fácil… pero te digo que es posible.
Este es el truco: si lo que quieres es comer lo que te gusta sin subir de peso, aprende a que te guste lo que te hace bien, y haz que el ejercicio y la disciplina con el plan de alimentación se vuelvan una parte agradable de tu rutina diaria.